La experiencia digital del colaborador está adquiriendo cada vez más relevancia en la experiencia general del empleado, aún más debido a la expansión del trabajo remoto e híbrido producto de la pandemia, donde solo en Latinoamérica se han sumado este sistema más de 23 millones de personas. No obstante, la exponencial importancia que ha alcanzado su implementación propone un sin número de desafíos a las áreas de Recursos Humanos, que deben desarrollar una gestión de personal que refuerce una experiencia digital del empleado que apoye el éxito empresarial de su organización.
Antes de responder esta pregunta, es necesario aclarar que hoy en día los trabajadores de prácticamente todos los sectores utilizan la tecnología para realizar sus labores, potenciando así sus competencias. Dicho esto, y en términos simples, podríamos decir que la experiencia digital del colaborador es reflejo de la eficacia con que los colaboradores interactúan con las tecnologías digitales disponibles en sus trabajos, siendo una herramienta que los motiva a comprometerse, ser competentes y productivos.
La experiencia digital del colaborador comprende la interacción con las tecnologías para cumplir con diversos propósitos:
La respuesta es sencilla. La mejora de la experiencia digital de los colaboradores los empodera y los revitaliza, beneficiando enormemente a las organizaciones. Cuando las interacciones digitales de los trabajadores simplifican sus tareas, se sienten mucho más satisfechos y son más productivos.
De esta manera, entre los beneficios que acarrea una buena experiencia digital se encuentra que los colaboradores desempeñen sus labores de forma remota, algo que puede ser optimizado a través de diversos métodos y que mejora su experiencia general de trabajo si las herramientas digitales con que cuentan son útiles.
Asimismo, invertir en la experiencia digital de los colaboradores contribuye a mejorar la experiencia del cliente, así lo demuestran diversas investigaciones que afirman que la experiencia de los empleados y clientes están interrelacionadas. Por otro lado, también aumenta la productividad, ya que una tecnología fácil de usar aporta eficiencia a las tareas; impactando en la rentabilidad del negocio debido a que contribuye a contar con un personal más comprometido y feliz, el que a su vez es más productivo.
Implementar una óptima experiencia digital del empleado no es un proceso fácil, por lo que estar conscientes de los obstáculos que se enfrentaran puede ayudar a prepararse para ello. Los retos asociados a la gestión de la DEX de una organización incluyen
Las personas estamos acostumbradas a disponer de una tecnología fluida en nuestra vida cotidiana, tendiendo a esperar el mismo nivel de facilidad digital en su espacio de trabajo. Por esta razón, al igual que en el resto de la experiencia del colaborador, el papel de RRHH es fundamental para dar forma a una gran experiencia digital del colaborador, teniendo la posibilidad de conectar con el personal y alinearse con otras funciones empresariales.
Dado que está expuesto a los puntos de vista de toda la organización, el profesional de RRHH podrá identificar y promover el uso eficaz de las herramientas digitales con el fin de impactar positivamente en la experiencia de los empleados, lo que finalmente ayudará a que la organización alcance sus propósitos y cumpla con sus objetivos.